Dixit #7a

Canción: St. Pauli – Talco

He vuelto, y eso solo puede significar cosas buenas. Tardé un mes en llegar a un acuerdo con Nuño para abrir la sección, dediqué otro mes a la sección, y solo he tardado cinco meses en volver de vacaciones. Reivindicar el derecho a la pereza sigue estando en mis prioridades. Cosas se han ganado y otras se han
perdido en este tiempo, pero ¡eh! ¡Que os jodan! Al menos no es diciembre.

Me gusta pensar en estas cosas. También me gusta pensar que me importan. A veces pongo al ser humano en contexto, y veo que somos una insignificante miseria en el Universo. Se el ser humano no hubiese existido, el Universo no habría cambiado lo más mínimo. Ni siquiera le somos molestos, simplemente estamos ahí, y nada de lo que hagamos puede cambiar nada más allá de nuestro planeta. 

Y a pesar de que no somos absolutamente nada en el conjunto del Universo, el ser humano consigue preocuparse, consigue que le agobien ciertas cosas, y que le enfaden ciertas otras. Se siente feliz a veces, y a veces no. Pese a nuestro tamaño, conseguimos que lo que nos rodea parezca importante, grave, incluso vital.
Estoy muy a favor de las preocupaciones humanas, que el que se agobie se siga
agobiando, que el que se enfade se siga enfadando, y que el que sea feliz lo siga siendo. Yo solo espero ahora que el invierno no me hiele demasiado la cabeza, y que disfruten mucho aquellos que ahora saludan al verano.